En un caso
inédito, una asociación civil que se autodenomina Comisión Mexicana de Derechos
Humanos solicitó a la Secretaría de Gobernación aplicar el artículo 33 de la
Constitución a los chilenos Camila Vallejo, Marcos Alberto Enriquez-Ominami
Gumucio y al asesor uruguayo Luis Costa Bonino “por inmiscuirse en asuntos
políticos del País”.
La Constitución política de los Estados Unidos Mexicanos señala en su Artículo
33: “Son personas extranjeras las que no posean las calidades determinadas en
el artículo 30 constitucional y gozarán de los derechos humanos y garantías que
reconoce esta Constitución. El Ejecutivo de la Unión, previa audiencia, podrá expulsar del territorio nacional a
personas extranjeras con fundamento en la ley, la cual regulará el procedimiento
administrativo, así como el lugar y tiempo que dure la detención. Los
extranjeros no podrán de ninguna manera inmiscuirse en los asuntos políticos
del país”.
Dicha asociación, supuesta garante de los derechos humanos, también presentó una queja ante el Instituto Federal Electoral (IFE) contra los
activistas y turno copia de ambas a la Presidencia de la República.
“Con la presunta complicidad de los partidos que integran la coalición
Movimiento Progresista, agentes políticos extranjeros se han inmiscuido en la
elección federal de México a fin de que se imponga al candidato presidencial
Andrés López Obrador y de no ser así reventar los comicios y buscar su anulación”,
dice el comunicado.
Consideró
que el IFE debe actuar contra toda injerencia externa a fin de cumplir con suobligación de garantizar un proceso electoral
legal y pacífico.
En un tono
completamente sesgado, la supuesta organización defensora de derechos humanos acusó
al instituto de ser “omiso y negligente” al permitir que la líder estudiantil
chilena Camila Vallejo y el ex candidato presidencial chileno, Marcos Alberto
Enríquez-Ominami hayan asesorado al movimiento estudiantil mexicano conocido
como #Yosoy132.
Sin
presentar pruebas, la asociación también aseguró que Costa Bonino ofreció
prebendas a los posibles donantes de López Obrador, en la cena en la cual se
dijo que la campaña del tabasqueño necesitaba seis millones de dólares.
Redacción
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