Pepe Meade se integra al consejo de administración de Grupo Alfa

Foto: @JoseAMeadeK

José Antonio Meade formará parte del Grupo Industrial Alfa como consejero de administración.

En el marco de la asamblea ordinaria que celebran accionistas del consorcio en Monterrey fue avalada la postulación del ex candidato priista a la Presidencia y también extitular de Hacienda, informan el diario El Norte y El Financiero.

El consejo al que se sumará Meade también participan Claudio X. González, presidente del consejo de Kimberly Clark de México; David Martínez, presidente de Fintech Advisory; Alejandro Ramírez, director general de Cinépolis; y Adrián Sada, presidente del consejo de Vitro.

El salario que percibe cada consejero del Grupo Industrial Alfa se tasa en centenarios; ocho monedas de cincuenta pesos oro al año, más cuatro por cada junta de comité a la que asistan. Es decir, Meade podría percibir 256 mil pesos al año más 128 mil pesos por cada junta a la que asista, al precio de venta de monedas de centenario (32 mil pesos) a fecha de este 28 de febrero. 

El Grupo Industrial Alfa, es un conglomerado que administra portafolios de negocios de empresas como Sigma (productor de alimentos), Alpek (productor de fibras), Axtel (del sector de la tecnológica), Newpek (del sector hidrocarburos) y Nemak (del sector automotriz), refiere Forbes.

Esta semana también se supo que Meade Kuribreña se integrará al consejo de HSBC Holdings, donde sus percepciones serán superiores a las del presidente Andrés Manuel López Obrador: 230 mil pesos al mes. 

La llegada de Meade a estas empresas parece un desafío a las palabras del presidente liberal Andrés Manuel López obrador, quien calificó de “chapulines fifís” a los exfuncionarios que tras dejar sus cargos se han ido a trabajar a empresas privadas del sector y que caen en conflicto de interés.

Cabe recordar que Meade Kuribreña era secretario de Hacienda, cuando desde Estados Unidos se destapó que el banco HSBC lavaba dinero del narcotráfico. 

El funcionario del gobierno del priista Enrique Peña Nieto cerró la investigación sin castigos ejemplares, argumentando que el caso había sido corregido a cabalidad y lo minimizó a "faltas administrativas". 

José Antonio Meade fue candidato presidencial representando al PRI y se convirtió en el peor contendiente de ese partido en la historia, llevando al corrupto Revolucionario Institucional a convertirse en la quinta fuerza política.