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| Foto: Presidencia |
El jefe del Ejecutivo Federal, en entrevista radiofónica con Leonardo Curzio en Enfoque, agregó “voy a evitar la palabra, para ser muy respetuoso, pero esta compra-venta de voluntades políticas, así sea una o 10 o 100 o mil, pues es simplemente inaceptable y hago votos porque la autoridad electoral rectifique de inmediato y la castigue si debe castigarla”.
El mandatario insistió que la esencia de la democracia no es sólo contar los votos, sino que las campañas “se desarrollen en condiciones iguales”.
El asunto de las tarjetas (de Soriana) “es un tema que no digo que va a ser suficiente, no lo sé, para descalificar una elección con esas diferencias, pero que debe ser resuelto, por supuesto. Oye, no podemos quedarnos así nada más, ´qué tanto es tantito´ en eso”.
Justificó que las autoridades no pueden determinar la gravedad de la compra de votos pues no se sabe cuanto influyó en la presunta compra de votos durante la elección presidencial.
El mandatario reconoció que este tema “influirá en la forma en la que la transición de gobiernos sea de manera fluida y suave o difícil” para quien resulte el presidente electo.
Además, afirmó que sí hubiera aceptado la invitación de Josefina Vázquez Mota a dirigir la PGR, de haber llegado a Los Pinos, e insistió en que a él no se le puede responsabilizar de los 60 mil muertos por actos violentos durante su gobierno, porque de cualquier manera hubieran ocurrido los asesinatos, pero con la diferencia de que Estado estaría sometido a los carteles de la droga.
Redacción con información de La Jornada.
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